Los estudios citológicos permiten precisar un diagnóstico con mínima invasión, rapidez y bajo costo. El material es obtenido por el médico tratante, mediante citología exfoliativa (citología ginecológica: PAP), por punción aspiración con aguja fina (tiroides, mama, ganglios linfáticos, tejidos blandos, etc) o aspirando líquidos corporales (paracentesis, toracocentesis).